La empresa rusa Gazprom invocará «fuerza mayor» para detener el suministro de gas a Europa a través del gasoducto Nordstream 1.
Según Reuters, la indicación se envió a al menos un cliente importante la semana pasada, el 14 de julio, y la compañía pronosticó dificultades para abastecer a Alemania y países vecinos, debido a circunstancias extraordinarias fuera de su control.
El gasoducto Nordstream 1 ha estado cerrado desde el 11 de julio, en un descanso regular para mantenimiento de diez días. Sin embargo, tras las sanciones contra Rusia, por la invasión militar a Ucrania, los países de la Unión Europea temen que los equipos no sean reactivados el jueves, como estaba previsto.
Bruselas ya prepara un plan de emergencia para ser presentado el miércoles. El documento debe presentar los límites de uso de energía del bloque, así como la diversificación de las fuentes de energía y la creación de un sistema de alerta.
La semana pasada, Gazprom ya había publicado un comunicado indicar que no poder garantizar el buen funcionamiento del gasoducto Nordstream, ya que no pudo confirmar si recogería una turbina alemana en reparación en Canadá.
«Gazprom no tiene en su poder ningún documento que permita a Siemens retirar el motor de turbina de gas de Canadá» que Ottawa ha declarado querer devolver a Berlín, se lee. «En estas condiciones, no es posible sacar una conclusión objetiva sobre la evolución de la situación relativa a la operación segura» del gasoducto.
La turbina en cuestión, en reparación en Canadá, fue protagonista de otro tenso momento diplomático, Alemania pide al ejecutivo de Justin Trudeau una excepción a las sanciones contra Moscú, para permitir la recuperación y envío del material. El gesto fue condenado por Ucrania.
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