Federico Chiesa está disfrutando de una Euro-2020 muy positiva, haciendo historia al marcar con Italia, en el partido ante Austria, 25 años después que su padre Enrico. Después de noquear a Bélgica, Italia se medirá a España en las semifinales y el extremo de la Juventus dijo el domingo que el equipo intentaría dedicarle una victoria a su compañero Leonardo Spinazzola, gravemente lesionado, ante los belgas, una fractura en el tendón de Aquiles del pie izquierdo.
«Fue una sensación fantástica poder continuar con mi apellido en el fútbol europeo y mundial. Estoy orgulloso de ser el hijo de mis padres. Hablé con mi padre esa noche, estaba feliz por mi gol, pero sobre todo porque Italia ha pasado «, dijo en una entrevista con Sky Sport Italia.
De vuelta en el partido ante Bélgica, Chiesa subrayó al técnico Roberto Mancini: “Hicimos un gran partido, pero es gracias al trabajo que ha desarrollado el técnico en los dos últimos años, nuestra idea de fútbol, nuestra ilusión. Somos como hermanos. Ahora vienen los resultados.
Y en este sentido, Chiesa espera dedicar un nuevo triunfo a Spinazzola, que se detendrá durante varios meses. “Lo siento por Spina, tuvo una gran Euro y fue un jugador clave. No es bueno perder a un hermano. Recuperemos y tratemos de dedicarle algo bueno, una alegría ”, agregó.
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