Si bien el foco está en el automóvil, lo cierto es que existen muchos otros escenarios donde los vehículos eléctricos autónomos podrían ser mucho más necesarios y eficientes. Un ejemplo son los cargueros que han estado en rutas predefinidas durante años, utilizando prácticamente los mismos métodos para cada viaje y pueden transferir muchas de estas habilidades a la tecnología de navegación autónoma. La prueba se ha hecho y el pionero mundial del carguero eléctrico autónomo ha realizado su primer viaje.
Este avance tecnológico permitirá ahorrar 1.000 toneladas de emisiones de carbono al año.
El barco todavía tiene cubierta, pero solo para observar el comportamiento.
Su nombre es Yara Birkeland y es el primer buque portacontenedores totalmente eléctrico y libre de emisiones del mundo. El barco hizo su viaje inaugural en Noruega. Birkeland viajó unos 14 km desde Porsgrunn hasta el puerto de Brevik, según un comunicado de prensa enviado por sus creadores, Yara.
Aunque parece un viaje corto, como gran productora de fertilizantes, Yara realiza aproximadamente 40.000 viajes en camión al año para transportar sus productos al puerto de exportación de Brevik. El buque portacontenedores reemplazará los viajes en camión a partir del próximo año.
Por tanto, este cambio en la estrategia de transporte debería permitir reducir 1.000 toneladas de emisiones de carbono al año.
El trabajo en el buque portacontenedores totalmente eléctrico de 80 metros de eslora comenzó a principios de 2017, como lo dimos a conocer. Está diseñado para transportar 103 contenedores en un solo viaje.
Birkeland funciona con una batería de 7 MWh y puede viajar a una velocidad máxima de 15 nudos. El apoyo financiero para la construcción del primer carguero de este tipo provino de Enova, una empresa del gobierno noruego que promueve el uso de energías renovables.
Enova ha donado 133 millones de coronas noruegas (unos 13,25 millones de euros) para construir Birkeland, que puede viajar por su cuenta.
Cruzar el mar sin seres humanos al mando ya es una realidad
El buque tiene una amplia gama de tecnologías de navegación autónoma. Tiene sensores que pueden detectar objetos como kayaks de agua, icebergs y otros obstáculos. Kongsberg proporcionó todas estas integraciones para operaciones independientes.
En el futuro, el barco podrá cargar y descargar su carga, cargar su batería y navegar sin ninguna intervención humana, dijo la compañía. A partir del próximo año, el buque portacontenedores realizará dos viajes por semana con tripulación manual. La tecnología de navegación automática se probará durante un período de dos años, después de lo cual se certificará que la embarcación es autónoma y se retirará la cubierta de la embarcación.
Además de limpiar sus emisiones de transporte, Yara, uno de los mayores emisores de carbono de Noruega, también planea producir amoníaco verde. Como productor de fertilizantes, Yara necesita grandes cantidades de amoníaco, cuya producción aporta poco más del 1% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, según el comunicado de prensa de Yara.
La empresa de fertilizantes también quiere utilizar este amoníaco verde como combustible para los barcos.
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