«Este es un día histórico para Melilla», dijo Elena Fernández Treviño, responsable de educación y cultura en el enclave de Melilla, según cita Reuters. Y agrega: «Era la única estatua dedicada a un dictador que todavía se encontraba en la esfera pública de Europa».
Esta estatua había sido colocada en Melilla tres años después de la muerte de Franco en 1978. Marcó el mando del dictador de la Legión española en la guerra de Rife. Este conflicto involucró a España y Francia contra las tribus bereberes en la región de Marruecos en la década de 1920.
Vox votó en contra de la eliminación propuesta, destacando que la estatua aludía al papel militar de Franco y no a la dictadura. Por ello, el partido de extrema derecha replica que la ley no se aplica a esta representación en Melilla.
En 2007, España aprobó la Ley de Memoria Histórica, que definió la retirada de todos los símbolos asociados al franquismo.
Desde entonces, el gobierno español ha retirado del espacio público los artículos relacionados con Franco.
Era última estatua del dictador, en suelo español, que aún permanecía en el pedestal.
El general Franco dirigió el Dictadura española entre 1939 y 1975. Dirigió un régimen nacionalista, respaldado por la Alemania nazi y la Italia de Mussolini, que derrotó al gobierno republicano durante la Guerra Civil española entre 1936 y 1939.
El conflicto dejó un legado de más de 30.000 muertos en combate o civiles asesinados, incluidos muchos portugueses que trabajaban en los territorios fronterizos.
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