Foto: Sébastien Liste/ FAO/ Divulgación
El acceso equitativo de las mujeres a los sistemas agroalimentarios reduciría la situación de inseguridad alimentaria de 45 millones de personas en todo el mundo.
También se dice que la facturación de aproximadamente $ 1 billón en la economía global es el resultado de la igualdad de género.
Esto es lo que la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (LEVA) en un informe sobre la discriminación de la mujer en el trabajo agrícola.
Según la agencia, el 36% de la fuerza laboral femenina en todo el mundo trabaja en sistemas agroalimentarios. Estos sistemas abarcan conceptos relacionados con el desarrollo rural de una localidad, como acceso a la tierra y al agua, medios de producción, distribución y comercialización de alimentos.
El documento señala que, a pesar de un número cercano a la fuerza laboral masculina (38%), las condiciones son peores que las de los hombres.
Son casos de irregularidad, informalidad, mayor intensidad laboral y menores salarios y discriminación que revelan un rol “marginado” de las mujeres.
Otra realidad destacada es que tienen menos propiedad de la tierra, menos acceso a crédito y capacitación y necesitan usar tecnologías que fueron diseñadas para hombres.
Primero en ser lanzado
Las mujeres son siempre las primeras en ser despedidas cuando las economías están en apuros. En el primer año de la pandemia de COVID-19, según el informe, el 22 % de las mujeres en los segmentos no agrícolas de los sistemas agroalimentarios mundiales perdieron sus trabajos.
Durante el mismo período, solo se despidió al 2% de la mano de obra masculina.
En realidad, el sistema desigual identificado da como resultado una diferencia del 24% en la productividad entre agricultores y agricultoras. Esta es la base de cálculo utilizada por la FAO para sus conclusiones.
Para la organización, la reducción de las disparidades de género se ha estancado o revertido.
Para superar estos obstáculos, la FAO presenta recomendaciones para construir sistemas agroalimentarios más justos y sostenibles.
Entre ellos, mejorar el acceso de las mujeres a internet móvil. Entre 2017 y 2021, ha habido una disminución del 25 % al 16 % en los países de ingresos bajos y medianos.
Otra acción importante es garantizar los derechos de propiedad de las tierras agrícolas para las mujeres.
«Aspirante a especialista en café. Solucionador de problemas. Fanático de los viajes. Creador. Apasionado aficionado a la televisión».