Según un comunicado conjunto, el objetivo de esta medida es «discutir las preocupantes medidas políticas y legales tomadas por el gobierno nicaragüense en los últimos días, que han puesto en peligro la integridad y libertad de diversas figuras de la oposición».
Entre estos líderes, los gobiernos de los líderes izquierdistas Andrés Manuel López Obrador de México y Alberto Fernández de Argentina citaron candidatos presidenciales, activistas y empresarios.
«Argentina y México permanecerán atentos a los desarrollos (…) e inequívocamente continuarán promoviendo el pleno respeto y promoción de los derechos humanos y las libertades civiles, políticas y de expresión», dijo el comunicado.
También ofrecieron su ayuda para promover un «diálogo» que contribuya a la resolución pacífica de esta situación, «con respeto al reparto de poderes, respeto a las minorías, garantías constitucionales y (…) pleno respeto al estado de derecho y todos los derechos humanos «.
Nicaragua atraviesa una crisis política con el encarcelamiento de cinco candidatos presidenciales y una decena de opositores desde el 2 de junio.
La más reciente de estas detenciones tuvo lugar el domingo, cuando el candidato presidencial y periodista Miguel Mora fue privado de su libertad.
Se le acusa de «incitar a la injerencia extranjera en los asuntos internos y solicitar la intervención militar» bajo una ley que el gobierno del presidente Daniel Ortega aplica a los opositores.
La escalada de tensiones se produce cinco meses antes de las elecciones legislativas, durante las cuales no se descarta que Ortega, de 75 años y 14 años consecutivos en el poder, se postule por cuarto mandato consecutivo.
Los embajadores convocados a consulta son Gustavo Alonso Cabrera (México) y Mateo Daniel Capitanich (Argentina), según el comunicado.
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