Suecia y Finlandia subrayaron este miércoles que su política de seguridad y defensa no se traduce en «neutralidad», por lo que estudian la posibilidad de entrar o reforzar la colaboración con la OTAN.
Según los embajadores, Teppo Tauriainen de Suecia y Sari Rautio de Finlandia, los países tienen «muy clara» su posición, asegurando que están listos para ayudar a los países vecinos. “Si les pasa algo a nuestros vecinos, estamos para ayudarlos, y si nos pasa algo, esperamos que nos ayuden”, dijeron durante un encuentro con la prensa.
“Queremos crear seguridad con nuestros vecinos y amigos de la UE”, subrayaron, señalando que su entrada en la UE supuso una evolución paulatina de sus políticas de seguridad y defensa y que, al igual que el resto de miembros de la Unión, apoyan decididamente Ucrania y condenar la invasión «ilegal e injustificada» de Rusia.
Cabe señalar que Suecia y Finlandia ya se unieron para enviar material militar a Ucrania y aprobaron la posibilidad de ampliar las sanciones a Rusia.
Para ambos países, la invasión rusa del territorio ucraniano ha supuesto «un gran cambio» en la vida de los países vecinos y también un cambio en la percepción del riesgo de un ataque inminente por parte del presidente ruso Vladimir Putin. «Hay una clara sensación de inseguridad, aunque no creemos que Rusia nos vaya a invadir», señaló Tauriainen.
Así, los dos países están reevaluando su política de seguridad y defensa.
Suecia ya ha formado un grupo de trabajo que habrá analizado no solo si el país se incorporará o no a la OTAN, sino «una planificación más amplia», explicó el embajador sueco, quien señaló que el país ya mantiene una «relación muy estrecha» con otras naciones como como los Estados Unidos y el Reino Unido. Cabe señalar que las conclusiones de este grupo se presentarán próximamente.
Suecia también ha reforzado la seguridad desde la invasión rusa de Ucrania en 2014 y, al igual que varios países europeos, aprobó un aumento en el presupuesto de defensa tras el ataque a Ucrania.
El Gobierno finlandés ya está ultimando «un libro blanco» que también cambiará el rumbo de la política de seguridad y defensa «dentro de la UE» y la creciente «cooperación» con la OTAN, que pronto se debatirá en el parlamento.
Incluso con las amenazas de Putin sobre las posibles consecuencias que podrían sufrir estos dos países si se unieran a la OTAN, el embajador finlandés subrayó que las «amenazas del Kremlin» no son nuevas. «Claramente, él no querría que nos uniéramos a la OTAN, pero no prestamos mucha atención a la retórica amenazante», dijo.
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