En julio de 2021, un tribunal de Marsella impuso una multa de 500.000 euros (unos 550.000 dólares) a Terra Fecundis, ahora rebautizada como Trabajo para Todos, y condenó a sus tres líderes a cuatro años de prisión en suspenso y una multa de 100.000 euros.
Entre 2012 y 2015, el grupo español proporcionó alrededor de 26.000 trabajadores, en su mayoría sudamericanos, a varias granjas francesas. No se les pagaban horas extras y algunos tenían que trabajar hasta 70 horas a la semana.
Las condiciones de trabajo eran tan pésimas que algunas fincas eran conocidas como «Guantnamo», en referencia al centro de detención del ejército estadounidense en Cuba, o incluso bajo el nombre de «Cárcel».
Un tribunal de Nimes volvió a juzgar a Terra Fecundis el mes pasado por hechos de diciembre de 2017 a octubre de 2018. El 1 de abril lo condenó a una multa de 375.000 euros (412.000 dólares), según el veredicto visto por AFP el lunes.
La empresa, cuya sede social se encuentra oficialmente en Marcia (sureste de España), ahora también tiene prohibido realizar cualquier actividad relacionada con el trabajo temporal en Francia.
Esta vez, los responsables no fueron imputados. Sin embargo, se han impuesto multas de 10.000 a 15.000 euros (entre 11.000 y 16.500 dólares) a los administradores de siete granjas que utilizaron sus servicios para «emplear ilegalmente a trabajadores extranjeros».
Uno de los funcionarios también fue condenado a seis meses de prisión condicional por haber alojado a sus trabajadores en condiciones indignas, según la sentencia.
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