El ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, consideró un “error individual” la reciente filtración de información del ejército alemán sobre el suministro de armas a Kiev.
Según la diplomacia berlinesa, uno de los oficiales del ejército alemán participó de forma remota en una reunión mediante una “llamada no autorizada”.
En una conferencia de prensa, Pistorius dijo que el sistema de comunicaciones de la Bundeswehr (fuerzas armadas alemanas) era confiable y agregó que la confianza de los aliados en Alemania «permanece intacta».
El viernes pasado se publicó en las redes sociales rusas una grabación de audio de una reunión entre altos funcionarios alemanes.
Berlín confirmó el sábado que la grabación era auténtica y había sido interceptada.
En la grabación de audio los participantes discuten la posibilidad de suministrar a Kiev misiles Taurus de largo alcance de fabricación alemana.
El lunes, el Kremlin reiteró sus acusaciones de «participación occidental directa» en Ucrania, tras la publicación de intercambios de mensajes entre funcionarios alemanes sobre el suministro de armas a Ucrania.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que la información compartida en las redes sociales, incluida una grabación, mostraba «una vez más la participación directa de Occidente en el conflicto».
«La grabación (grabación de sonido) muestra que dentro de la Bundeswehr hay discusiones detalladas y concretas sobre los planes que se llevarán a cabo contra territorio ruso», añadió Peskov.
La agencia France-Presse escribió el lunes que «La conversación es muy embarazosa» para Alemania, ya que Berlín se niega oficialmente a entregar misiles Taurus a Kiev, citando el riesgo de una escalada del conflicto.
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