El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, extendió este jueves, por decreto, la lista negra de empresas chinas que no pueden beneficiarse de las inversiones estadounidenses por supuestos vínculos con el ejército chino. La lista había sido puesta en práctica por la administración del expresidente Donald Trump.
«Este decreto autoriza a Estados Unidos a prohibir, de manera selectiva y circunscrita, las inversiones estadounidenses en empresas chinas que pongan en peligro la seguridad y los valores democráticos de Estados Unidos y nuestros aliados», dijo la Casa Blanca en un comunicado.
La lista ahora incluye 59 empresas, en lugar de las 31 anteriores, consideradas empresas que suministran o apoyan al complejo militar y de seguridad chino.
Washington dice que ha juzgado por su decisión que el uso de tecnologías de vigilancia chinas fuera de China, así como su desarrollo o su uso para facilitar la represión o violaciones graves de los derechos humanos, constituyen «amenazas inusuales y extraordinarias».
La lista incluye importantes grupos de construcción, telecomunicaciones o tecnología como el fabricante de teléfonos Huawei, el gigante petrolero CNOOC, China Railway Construction, China Mobile, China Telecom o la empresa de videovigilancia Hikvision.
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