El biólogo francés François Gros, que participó, entre otras cosas, en el descubrimiento del ARN mensajero, falleció el viernes a los 95 años, informó este domingo la Academia de Ciencias de Francia.
La contribución de Gros a la decodificación de la función genética fue «decisiva» en la revolución molecular de la biología, señaló la Academia en una biografía que publicó del científico, allanando el camino, por ejemplo, para el uso de la tecnología en algunos de los anti- vacunas inflamatorias.COVID-19.
François Gros comenzó su carrera en 1945 como profesor en el Centro Nacional de Investigaciones Científicas (CNRS), donde se convirtió en director de investigación (1962-1968) y miembro del consejo de administración (1976). También fue Director General del Institut Pasteur entre 1976 y 1981.
El biólogo parisino se interesó primero por el funcionamiento y la regulación de los genes, y en 1961 reveló, por primera vez, los ácidos ribonucleicos (ARN) llamados «mensajeros», que transportan información desde los cromosomas hasta el sistema de formación de proteínas.
En colaboración con Jacques Monod y François Jacob, el trabajo de Gros, según la Academia, ha permitido identificar cómo se produce la regulación del funcionamiento genético de las bacterias a nivel molecular bajo la influencia de «estímulos externos».
Monod, Jacob y André Lwolff ganaron el Premio Nobel de Medicina o Fisiología en 1965.
La pandemia ha vuelto a poner en primer plano sus descubrimientos: las vacunas de las farmacéuticas Pfizer y Moderna se desarrollan a base de ARN mensajero, una tecnología basada en ácidos ribonucleicos mensajeros, que permite inyectar instrucciones o moléculas que inducen a las células a producir ciertas proteínas en el cuerpo. . .
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