En los últimos días, diplomáticos de los tres países han intensificado las negociaciones para encontrar una solución a la crisis. Países como Alemania, el Reino Unido, Francia y Estados Unidos han expresado su apoyo a los esfuerzos de diálogo de los mediadores. Era posible que los presidentes volvieran a hablar este lunes, con la esperanza de diseñar estrategias para hablar tanto con Maduro como con la oposición. Pero la reunión no se llevó a cabo.
Lávese las manos
La sorpresa fue la declaración de Claudia Sheinbaum, quien asume el poder en reemplazo del presidente Andrés Manuel López Obrador. Sugirió que no le correspondía reconocer la victoria de Edmundo González, el candidato opositor. “Para eso contamos con organismos internacionales”, afirmó.
El presidente electo respondía a un llamado de la líder opositora venezolana María Corina Machado, quien insistió en que los mexicanos «escuchen el dolor de las madres venezolanas» y mantengan la presión sobre Maduro para garantizar una transición pacífica.
Sheinbaum se lavó las manos, en un acto que fue interpretado como una señal de que incluso estaba dando marcha atrás en los compromisos de México en declaraciones conjuntas con Brasil y Colombia. “No depende de mí, tenemos organismos internacionales para eso”, afirmó. Simplemente mantuvo la posición de México que exigía transparencia.
«Respetamos a todos. Pero sobre todo el derecho de los venezolanos a decidir quién los gobierna. Si hay un problema, para eso hay instituciones internacionales», declaró, sin especificar quiénes serían esas entidades.
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