En España, incluso frenando, te pueden «pillar»

El principal objetivo de los radares de tráfico es reducir los accidentes. Como parece natural, frenando a escondidas y reduciendo la velocidad, no habrá motivo de multa… pero en España no es así.

Radares: radares en cascada y radares de sección
La Dirección General de Tráfico (DGT) en España ha implementado varios tipos de controles de velocidad.  Según recientes noticias publicadas en España, cuando los conductores frenan ante el radar de tráfico, para no ser pillados por encima de la velocidad autorizada, no significa que no hayan cometido ya una infracción.  De hecho, en España, la DGT utiliza radares en cascada y radares de sección.
El sistema conocido comoradares en cascada» consiste en colocar un cinemómetro móvil (radar móvil) después del radar fijo para detectar la velocidad de los infractores.  Cada vez que un conductor intente "engañar" a la cámara fija, la cámara móvil intentará registrar la velocidad y luego multará al infractor.








Los radares móviles tienen un margen de error de 7 km/h en carreteras con una velocidad máxima inferior a 100 km/h.  A partir de ese momento, el radar registrará una infracción a partir de 58 km/h, en una zona limitada a 50 km/h.  Si la velocidad máxima supera los 100 km/h, se aplicará un margen del 7%.  Así, todos los coches que circulen a más de 117,7 km/h, por una vía con límite de 110 km/h, también recibirán la correspondiente multa.
Con respecto a radares de sección, estos permiten registrar la velocidad media de un conductor.  Estos radares calculan si, de media, los vehículos circulan más rápido de lo esperado en una ruta determinada.
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A diferencia de los radares fijos y móviles, los radares medios no indican la velocidad instantánea de los vehículos, sino que calculan si han viajado más rápido de lo esperado entre dos puntos de una ruta determinada.  Además de los existentes en España, este tipo de radar también se utiliza en Portugal desde 2021.