La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos anunció el sábado que exigirá «inspecciones inmediatas» de varios Boeing 737 MAX 9 para que puedan volver a ser utilizados por las aerolíneas.
También dijo que estaba investigando el caso del vuelo de Alaska Airlines.
El viernes, un vuelo que conectaba Portland, Oregón, y Ontario, California, realizó un aterrizaje de emergencia después de perder una ventana en pleno vuelo.
El Boeing 737 MAX 9 en cuestión, que estuvo en servicio sólo ocho semanas, finalmente aterrizó de forma segura con 171 pasajeros y seis miembros de la tripulación a bordo.
Hasta el momento, no ha habido indicios inmediatos de la causa de la aparente falla estructural, ni informes de heridos.
En imágenes publicadas en redes sociales se puede ver una puerta desprendiéndose de la cabina en pleno vuelo.
La decisión de la Administración Federal de Aviación está muy lejos de la prohibición completa e indefinida de seguridad en todos los aviones de la familia MAX hace casi cinco años, pero representa otro golpe para Boeing mientras la compañía intenta recuperarse de varias crisis de seguridad consecutivas en los últimos años.
Recuerda que este modelo, el modelo más vendido de Boeing, permaneció en tierra durante casi dos años después de los accidentes aéreos de octubre de 2018 y marzo de 2019, que en conjunto mataron a más de 340 personas.
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