Según la Agencia Espacial Europea (ESA), citada por la AFP, la sonda espacial Juice logró pasar entre la Luna y la Tierra, una maniobra delicada para ganar impulso y lanzarse hacia Júpiter.
La sonda, lanzada al espacio en abril, pasó cerca de la Luna el 19 de agosto, sobrevolando el sudeste asiático y el océano Pacífico, a menos de 7.000 kilómetros de altitud.
La operación consiste en pasar cerca de un cuerpo celeste para aprovechar su atracción gravitacional, una fuerza natural que permite desviar la trayectoria de la sonda y modificar su velocidad, acelerándola o desacelerándola.
El cohete Ariane 5, que lanzó Juice al espacio, no era lo suficientemente potente como para impulsar la sonda directamente al sistema solar, a unos 800 millones de kilómetros de la Tierra.
Varias misiones espaciales ya han utilizado este método, llamado asistencia gravitacional, pero el vuelo de la Luna combinado con el de la Tierra fue «una primicia mundial», subrayó la ESA.
Esta maniobra provocó que la sonda acelerara ligeramente a su paso cerca de la Luna, antes de desacelerar cerca de la Tierra y cambiar de dirección hacia Venus, donde llegará en 2025.
Luego regresará a la Tierra para realizar dos sobrevuelos adicionales en 2026 y 2029, antes de llegar finalmente a Júpiter en julio de 2031.
Juice permitirá observar las lunas heladas del planeta naranja -Europa, Ganímedes y Calisto-, además de probar los instrumentos de la sonda que se utilizarán a tal efecto.
A su vez, esta operación también permitirá comprender qué entornos son propicios para la posible presencia de vida extraterrestre.
La maniobra Luna-Tierra, sin embargo, sólo se llevó a cabo después de que los expertos hicieran pequeñas correcciones en la ruta durante el mes de julio.
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